Cinco movimientos para un silencio: Allegro
N. Lygeros
Traducción al español de Eduardo Lucena González y Olga Raptopoulou
La escena está vacía, sin objeto alguno. Es difícil definir su naturaleza. Representa el símbolo musical. Un personaje entra inesperadamente en la escena. Lleva un periódico en una mano y una silla en la otra. Arrastra la silla apresuradamente.
Lucas
No pensé que esto fuera posible… Silencio.
Se sienta en la silla y mira el periódico asombrado.
Otro personaje llega arrastrando también una silla. Se sienta mirando hacia la dirección opuesta. Ahora están espalda con espalda.
Marcos
Al contrario, creo que todo es posible…
Lucas se vuelve hacia Marcos.
Lucas
¿Has leído el periódico?
Marcos
¡No!
Lucas
Entonces, ¿cómo puedes saber de qué hablo?
Marcos
No lo sé.
Lucas
¡Eres insoportable!
Marcos
¡Es un poco exagerado!
Lucas
El asunto es serio.
Marcos
Estoy de acuerdo… Tiempo. Sin embargo, ¿cambia eso algo?
Lucas
¡Precisamente ahí radica todo el problema!
Marcos
¿Cuál es el tema de nuestra conversación de hoy?
Lucas
¡Un crimen que pudo no haber existido!
Marcos
¡Qué tema!
Lucas
Pues sale en primera página… Muestra el periódico.
Marcos
Eso no demuestra nada... ¿De qué se trata?
Lucas
De genocidio… Silencio.
Marcos se gira bruscamente.
Marcos
Pensé que estabas bromeando.
Lucas
Todo el mundo piensa que es una broma.
Marcos
¿Hablas en serio?
Lucas
Sí. Silencio.
Le muestra el periódico. Marcos lee el artículo. Su rostro es triste.
Marcos
No tienen conciencia. Tiempo. ¿Cómo pueden burlarse de un tema así?
Lucas
Porque hoy en día todo se percibe como broma.
Marcos
Pero este no es sólo un crimen de guerra, es un crimen contra la Humanidad.
Lucas
¿Y cuál es la diferencia para ellos? Son sólo palabras.
Marcos
Sí, ¡pero estas palabras hieren a la memoria!
Lucas
Las personas que sobrevivieron al genocidio van muriendo, y con ellas la memoria.
Marcos
¡Tenemos, entonces, que actuar!
Lucas
Pero, ¿cómo?
Marcos
Somos nosotros los que tenemos que recordarlos.
Lucas
¡Eso no será suficiente!
Marcos
Entonces, debemos no olvidar. Silencio.
Lucas
Sí, eso es… Tiempo. Sólo la memoria puede vencer a la muerte.
Marcos
Por eso tratan de asesinar nuestra memoria.
Lucas
¡Pero si no somos ni armenios, ni chipriotas, ni griegos, ni judíos, ni…!
Marcos
¡Eso no es motivo! ¡Al contrario!
Lucas
¿Al contrario?
Marcos
Ya que la memoria no ha marcado nuestro cuerpo, tiene que marcar nuestra mente.
Lucas
¿Te das cuenta del esfuerzo que eso representa?
Marcos
El deber no es esfuerzo. Tiempo. No estábamos allí a la hora de lo ocurrido, pero estaremos presentes de ahora en adelante.
Lucas
¡No somos responsables de las vidas del pasado, sino de la memoria del futuro! Silencio. Sólo que... ¿quién va a creernos?
Marcos
Las personas que saben sufrir.
Lucas
¡Pero son tan pocas!
Marcos
Son el principio de la resistencia.
Lucas
¿Quieres decir que los que resisten son siempre pocos?
Marcos
Sí, se vuelven muchos sólo cuando triunfan.
Lucas
¿Y si fracasan?
Marcos
Por lo general se olvidan de ellos.
Lucas
Necesitaremos a los demás.
Marcos
Siempre necesitamos a los demás.
Lucas
¿Vendrán?
Marcos
Siempre vienen.
Lucas
Pero esta vez es diferente.
Marcos
Entonces no volverán a marcharse.
Lucas
No puedo creer que traten de asesinar la memoria.
Marcos
¡Pues es cierto! Tiempo. Y si no resistimos, lo conseguirán.
Lucas
¿Qué podemos hacer? Tiempo. Somos solamente personas…
Marcos
Justamente por ser personas podemos resistir.
Lucas
¿Cuál será el precio?
Marcos
La memoria no tiene precio.
Lucas
Le tengo miedo a la muerte...
Marcos
Al olvido deberíamos tenerle miedo. La muerte es natural, ¡el olvido es inhumano!
Salen de la escena dejando las sillas.